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Artículo publicado en: Sin categoría » Experiencias Educativas (num. 4)


Como son los adolescente a los que educamos hoy

Como son los adolescente a los que educamos hoy 5La adolescencia,  nadie  lo  duda,  es  una  etapa  con?ictiva. Pero también es la “segunda oportunidad” que tenemos para corregir las conductas y actitudes poco satisfactorias. Es, pues, un período de gran con?icto consigo mismo y con los demás, pero al mismo tiempo es una posibilidad de cimentar de forma adecuada el edi?cio de la vida adulta.

La adolescencia comienza con la pubertad, es decir, con una serie de rápidos cambios fisiológicos que desembocan en la plena maduración de los órganos sexuales y la capacidad para reproducirse y relacionarse sexualmente. Como hemos dicho anteriormente, los cambios biológicos marcan el inicio de la adolescencia, pero ésta no se reduce a ellos, sino que se caracteriza además por significativas transformaciones psicológicas y sociales.

El análisis de la naturaleza de estas transformaciones depende de la perspectiva teórica que se adopte. Nuestro objetivo es centrarnos en la comprensión de las conductas de esta etapa que ocupa la Educación Secundaria. Estas conductas tienen claramente un soporte neurobiológico, debido a las diferencias que existen por ejemplo entre la edad a la que aparece la primera menstruación (menarquia) en las chicas y la primera eyaculación en chicos. La edad media en ellas es la de los trece años, siendo en ellos un año más aproximadamente cuando aparece su primera eyaculación. La aparición de ambos comportamientos es debido a las hormonas, las cuales son unas sustancias químicas producidas por diferentes glándulas de secreción interna, que vertidas a la circulación sanguínea realizan su función a distancia. Por esto, el sistema endocrino en la pubertad es fundamental, ya que establece relaciones entre el hipotálamo, la hipófisis y las gónadas (órganos reproductores). El hipotálamo regula funciones como la ingesta de alimentos y bebidas, y la hipófisis regula el sexo y el crecimiento. En cuanto a las gónadas, en estas se sintetizan las hormonas de cada sexo, siendo la de las chicas el folículo estimulante y el lúteo estimulante, además de los estrógenos, progesterona y leptinas. En los chicos la regulación del sexo comienza en los testículos donde se fabrica la testosterona. Esto produce que aparezcan diferencias entre chicos y chicas, donde ellas necesitan gustar y relacionarse socialmente y ellos necesitan ser respetados y ocupar, si pueden, un lugar importante en la jerarquía del grupo.

Estudios actuales sugieren que existe una relación entre la capacidad de socialización y la presencia de unas u otras hormonas. Así, el cerebro de la mujer, en mayor medida que el de ellos, encuentra enorme placer con la comunicación. Sin embargo, ellos se centran en las actividades deportivas o en el seguimiento sexual.

Desarrollo cerebral

Podemos diferenciar en el cerebro dos partes fundamentales: una parte o lóbulo que madura antes (sistema límbico) y una parte o corteza prefrontal que se desarrollo posteriormente. Así la forma más primitiva (sistema límbico) va a ser muy sensible a las influencias de las hormonas sexuales y su madurez se realiza antes que la prefrontal, el cual esta vinculado a la impulsividad. Todo esto puede explicar, en parte, las cambiantes, irritantes, y contradictorias conductas de los adolescentes.

Desarrollo de la identidad y la personalidad

En esta etapa, además de cambios en el desarrollo físico y cognitivo, se experimentan cambios en el desarrollo personal, social y moral. Debido a que los adolescentes se enfrentan a cambios entre su mente y su propio cuerpo, entre los aspectos físicos y los aspectos sociales, entre el mundo y el yo, entre la valoración objetiva y la valoración subjetiva del conocimiento; los adolescentes se centran en averiguar la eterna pregunta: ¿quién soy yo? Deberán decidir su futuro profesional, un estilo de vida y un tipo de relación social. Como consecuencia, a medida que se vayan dando respuestas a estas preguntas, se irá configurando una nueva identidad llena de matices. En esta búsqueda influyen factores personales, familiares, sociales y contextuales que van a ejercer una clara presión sobre sus decisiones y elecciones.

La amistad en la adolescencia desempeña un papel fundamental, y según Gottman y Parker (1987) presenta seis funciones básicas:

  • Como son los adolescente a los que educamos hoy 6Compañerismo: proporcionando compañeros con los que desean pasar tiempo juntos y hacer actividades en grupo.
  • Apoyo físico: proporcionando tiempo, asistencia  y apoyo.
  • Comparación social: proporcionando información sobre otros adolescentes con los que compararse para saber si lo que hace esta bien o no.
  • Autoestima: proporciona retroalimentación de ayuda para percibirse como personas atractivas y valiosas.
  • Estimulación: proporcionando diversión y disfrute.
  • Intimidad/afecto: favorece una relación cercana, cálida y de confianza con otra persona.

Generalmente los adolescentes tienen más en cuenta las opiniones de los amigos/as que la de los propios padres, a pesar de que esta influencia en ocasiones puede ser positiva, pero por norma suele ser negativa.

Este es un proceso en el que el individuo puede organizar y sintetizar las identidades de la etapa infantil para construir un camino que le lleve hacia la madurez adulta.

Por último, vamos a describir un retrato robot (Javier Elzo) de los adolescentes actuales para conseguir una mejor comprensión de sus comportamientos y actitudes:

  • Los adolescentes de hoy tienen baja tolerancia a la frustración y dificultad para diferir la satisfacción y para ser perseverantes en la culminación de sus metas, que no siempre tienen claras.
  • Anclados en el presente: los adolescentes se centran en lo cercano, cotidiano y próximo, ya el que futuro o las cuestiones a largo plazo no les interesan.
  • Relativistas pero buscadores de lo absoluto: buscan un absoluto que les de sentido y razón de ser a sus vidas.
  • Necesitados de afecto y compañía: sienten pavor a la soledad, aburrimiento y del silencio. Esto se ve incrementado con la incorporación de la mujer al mundo laboral, ya que así los adolescentes pasan más tiempo solo en casa.
  • Consumistas de lujo: se dedican a comprar todo tipo de cosas para tener todo igual que sus compañeros/as, sin importarles gastar todo el dinero disponible.
  • Espacios privados: buscan un espacio propio en los que ellos sean los protagonistas, generalmente los chicos en los deportes y las chicas en la moda y pasarelas.
  • Normas de casa: las más importantes son las normas del “finde”, ya que es ahí donde ellos se convierten en noctámbulos itinerantes. En estas noches predomina la seducción, lucimiento y la diversión. Generalmente se divierten bebiendo alcohol y consumiendo todo tipo de drogas (cannabis, cocaína, etc). La mayoría de los adolescentes confiesan que “bebemos para divertirnos, si no, no hay diversión”.
  • Permisivos en lo privado y exigentes en lo público: son más tolerantes en las cuestiones privadas (aborto, eutanasia, divorcios, etc) y más exigentes en lo público, sin tener en cuentas las molestias que causan con el botellón los fines de semana.
  • Ausencia de miedo y respeto hacia los mayores: debido a la legislación vigente, bien saben ellos que los menores no cumplen condenas proporcionales al delito cometido. Esto hace que ellos tengan “la sartén por el mango” y por tanto su complejo de protagonismo se viene arriba faltando el respeto a los mayores, padres, tutores e incluso a la autoridad.

Esto deriva en los problemas que cada vez más vemos en las aulas, donde las victimas pasan de ser los alumnos (como antiguamente), a ser los docentes en general.

Como conclusión, decir que los adolescentes son siempre nuevos y distintos porque nueva y distinta es la sociedad que los conforma y en la que bracean, especialmente desde la aceleración histórica que nos ha tocado vivir en el último siglo y medio.

Todo lo relatado en el artículo, es de vital importancia para conocer a los adolescentes de hoy y así los docentes saber como actuar en las aulas, ante ellos.

Bibliografía:

  • Revista «Avivir».Número 228. Marzo-Abril 2009.
  • C.M BRAVO Y J.I NAVARRO (Coord).(2009):»Psicología del desarrollo para docentes»
  • Weblogs Clarin.com:»Como hablar con un adolescente»
  • O.Herrero y otros:»Adolescencia y comportamiento antisocial»
  • OFFMAN,L PARIS,S. Y HALL,E. (1995).»Psicología del desarrollo hoy». Ed. McGraw- Hill.
  • P. Villar y otros:»Evaluación de variables de tipo familiar en la prevención de la conducta problema»

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Información del artículo:

Fecha de publicación:
5 de diciembre de 2009

Autor/a:
Teresa Cordero Baro


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